* Atado a ningún sitio

Agarrado al reflejo de la luna,
enganchado a un suspiro del corazón,
amarrado a una lágrima abundante,
...¡atado a ningún sitio!

  Sujeto a la línea del horizonte,
pegado al destello de un farol,
ligado a la solidez de los sueños,
...¡atado a ningún sitio!

  Encadenado a una bocanada de humo,
engarzado a un rayo de sol,
clavado al rastro de una estrella fugaz,
...¡atado a ningún sitio!

Y atado,

sin soltarse de ninguna parte,

vagando por el espacio unido a la nada,

perdido en el azul,

pasan días que parecen horas,

años que semejan meses

sin querer liberarse

ni desatarse.

Para siempre atado a ningún sitio.